Pretexto (V)

He decidido como me indica Cury, Augusto Cury, controlar mis ventanas killer para no empujar a mi cerebro a sentimientos destructores que se acumulen y catalicen hacía el ocaso. Para ello, primero de todo, es necesario recurrir al silencio cuando hay algo que abre éstas ventanas para que se cuele la rabia, el desconsuelo, la decepción o la tristeza. Para ello, he necesitado hacer mi propia mesa redonda en la que me censuro a mi misma por creer que no hay solución, que todo está podrido y perdido. Para ello, he necesitado experimentar en vez de ir a por más información. Cualquier cosa que se viva en propiedad sirve en éste caso. Y necesito igualmente en esa mesa redonda en la que solo hay tres comensales: Yo, yo y yo, escucharlos en cualquiera de sus tres versiones para escoger de entre las tres la que mejor se ajusta pasado The Time off silence, y poder elegir. Una vez cerradas las killer y haber dejado pasar el tiempo necesario , puedo rescatar lo que ellas han seleccionado después del ejercicio. Al fin y al cabo, hablo de mi cerebro, el único en el que puedo organizar libre y confiada. Ahora diría que sí, ahora puedo ver ese vídeo ( Ciudadanos de segunda ) que tanta polémica ha suscitado más aquí que allí sin convidar a esas delicadas ventanitas a reabrirse. Y decido pensar mientras tanto en el cuento que ha explicado otro de mis apóstoles preferidos, aquel que leo y va pariendo sus cuentos por delante de mis pensamientos, y alguna vez por detrás.

Sé que hay que que sufrir ese dolor en gemelos o vientre, lo sé. Pero yo no me sustento de mis seguidores, ni me aplauden o censuran. Mi cuento nace y sale de mi vientre como el tuyo, pero después de éste proceso de gestación y parto, no sé a donde va a parar. ¿ Recuerdas ? ( está voluntariamente cerrado al paso indiscriminado y a la publicidad ) Puedo tener mis piernas duras de tanto caminar, pero mis caídas pozo abajo después de gestar mi cuento muchas veces me atraen más al fondo del pozo que a trepar hacía la salida. Y visto el famoso vídeo y cerrado,decido ignorarlo. Voy a regalar a mis princesas, príncipes o fantasmas canciones con las que puedan soñar, imágenes donde volar, cualquier cosa menos incitar la apertura de sus killer antes de que estén dispuestos a defenderlas y preservarlas del desastre.