- Tienes razón. Escribir, es algo más que una afición. Escribir, es trabajar si lo haces profesionalmente y puedes vivir de ello. Escribir, es trabajar si lo haces sin estímulo económico, igualmente. Porque en el simple ejercicio de escribir hay la voluntad de expresarte correctamente, sin faltas, y la de manifestarte, aunque sea de forma discutible. Además, escribir, es una actitud, porque quien escribe, está pensando en escribir y no piensa en otra cosa cuando pasea, viaja, disfruta de una comida o se enfrenta ante cualquier hecho cotidiano. Esto he de convertirlo en una historia, a ver cómo consigo hacerlo. Escribir, no solo es una afición por conjugar frases, ajustar palabras y encubrir o desparramar emociones, es, también, un trabajo y un reto, porque requiere de un esfuerzo en el que consumirás bastantes energías , energías que nos dedicaras a otra cosa y que quedaran disipadas en el texto sin poderlas recuperar . Creo, que quienes tenemos esta afición, poseemos la seguridad de que estamos haciendo algo que nos gusta, pero, también tenemos la voluntad de convertir lo que nos disgusta en algo que nos agrada y esto no fácil.
El acto de escribir, no solo es una manera de disfrutar, es una labor, es un acto de voluntad, es un estilo de vida y una forma de proceder. Comprende, pues, que cuando hoy, aun existen personas que no ven en el ejercicio de escribir un trabajo, lo hacen porque no tienen ni idea de lo que significa hacerlo, ni tienen idea del compromiso que para ti es hacerlo, porque cualquiera puede escribir y hacerlo gratis, porque cualquiera puede escribir y ser leído, y porque, cualquiera, puede escribir y hacerse más o menos entendible. No sé si te servirá de algo, pero, yo te comprendo porque comprendo esta manía que te envuelve a cada paso que das por aquí, por allá, cuando estás en casa o cuando no estás. Y creo, que soy capaz de comprender la angustia que te invade cuando has de escribir y no tienes nada que explicar o no encuentras la forma de explicarlo. ¡Claro que escribir es trabajar! Si trabajar, se considera invertir un tiempo, tener un propósito y aceptar un compromiso, en cualquier empresa, esta lo es sin duda y es una empresa a la que puedes añadirle fantasía, documentación, alegría y tristeza, decepción y admiración, seriedad y humor, mucho más de lo que se emplea en cualquier otro trabajo, y, sin abandonar el compromiso firme de expresarte correctamente a favor de alguien o de muchos, no importa la cantidad de personas que te vayan a leer si no es en lo que afecta a tu salud mental. No me cabe ninguna duda que escribir es un trabajo, y un trabajo de los más honestos que existen, aunque no sea el más ilustre ni el más incómodo, porque en cada frase que construyes, no solo hay un tiempo invertido, hay también una elección y una determinación. Tiempo y decisión, juntos, son entregados al albur de una lógica desconocida y de una reflexión desigual. Por todo ello es que escribir, puede escribir cualquiera, pero escribir bajo la presión de un deber, además, no es para cualquiera. Y dejémoslo claro, si alguien puede decir que escribiendo es feliz, sin más, es que no escribe nada conveniente. Si cuando alguien escribe y pretende decir algo, no provoca alguna reacción, buena o mala, es que no ha dicho nada. Aunque, dejémoslo claro, también, escribir no es ejercer de portera indiscreta ni de madame cicuta, escribir y ganarte la vida escribiendo, es invertir tanta energía en el teclado como en el argumento, porque aunque lo manifestado sea de tu propiedad, cuando es leído, deja de serlo.
A proposito de una escritura incomprendida, o de un escritor incomprensible
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2 comentaris:
Que sería de muchos de nosotros sin un texto en las manos, por mi parte gracias a todos los escritores, buenos y malos, cómo bién dices Mek, es un trabajo escribir,y dejar que te lean. Un besote. Valle.
Gracias por seguir visitándome.
besote ;)
mek
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