carta de un amigo que no cesa ni cede:

“Las venas abiertas de América Latina” de Eduardo Galeano es con diferencia de lo más lúcido que he leído de Historia y política. Escrito hace 37 años es un análisis brutal, sin concesiones, del Imperialismo en Latino america y sus consecuencias, imprescindible para comprender el porqué pasan las cosas que pasan actualmente en el mundo y es como es. Mucho más moderno que todas esas memeces intelectualillas que escriben los posmodernos tipo Toni Negri, Hart o los muertos de Deleuze, Guattari o algunos de los filósofos de la escuela de Frankfurt.

Debería ser manual en las facultades de Historia cuando se dan las clases de Historia moderna y contemporánea pero por supuesto, no aparece ni en las referencias bibliográficas. No se puede permitir escribir Historia desde el punto de vista de los perdedores y oprimidos, la verdad es una: la que nos dicten los amos y poderosos.

Galeano por supuesto no es objetivo, señala culpables y asesinos, tomando partido por la clase obrera y los indígenas. Da pelos y señales del absoluto saqueo al que han sido sometidos estos países y del genocidio de 70 millones de indígenas en la conquista por parte de españoles, ingleses o portugueses. Explica como el capitalismo es posible a las riquezas y a la vez a la pobreza de América Latina. América es la sombra de la muerte de la cultura y los pueblos que la conforman.

Como dato curioso de cómo se manipula la Historia: en Brasil durante el siglo XVIII existió un Estado independiente del tamaño de Portugal creado a partir de la rebelión de esclavos negros, que habían sido arrancados de África para ser explotados hasta la muerte por los blancos cristianos superiores en nombre de Dios. La propiedad de la tierra era comunitaria, sin privilegios, y gobernaban aquellos de mayor prestigio por sus servicios a la comunidad. Y no duró un mes, ni un año ni diez,, sino más de un siglo, a pesar de los continuos intentos de aniquilamiento por parte del Imperio portugués. Sin embargo, sobre esto hay un silencio absoluto en la historiografía oficial.

Toni Negri debería leer el libro a ver si todavía se atreve a sostener la teoría esa de que ya no existe el imperialismo, tampoco los Estados nacionales ni las clases sociales, y demás gilipolleces sobre la globalización, concepto burgués para disfrazar lo que siempre ha sido: IMPERIALISMO. El tipo se atreve a afirmar que el capitalismo es casi comunismo ya.

Y para complementar el anterior otro libro, Imperio con Imperialismo, de James Petras, del 2003, en el que desmonta punto por punto los libros de Negri y Hart “Imperio” y “Multitud”. Analiza perfectamente como funciona el sistema capitalista actual, con sus centros imperiales.

Y para acabar con estupideces como la tolerancia y el multiculturalismo nada mejor que “En defensa de la intolerancia” de Slavoj Zizek. Demuestra como la tolerancia desmonta la pasión política y el multicularismo es el mejor lavado de cara del sistema y esconde posiciones conservadores en individuos que van de progres.

A partir de ahora sólo consideraré humano a quien halla leído el libro de Galeano.

(Iván)

...

Estoy leyendo un libro que trata del deseo de desaparecer, trata también de la relación continua del protagonista entre la realidad y la ficción, de cómo la halla, de cómo la persigue y de cómo la resuelve. No todos somos capaces de hacerlo, algunos, yo, bastante trabajo tenemos con leer y enterarnos de estas por escritores cómo Vila Matas. No se puede estar en un mundo y perseguir otro, o si se puede pero se termina vomitando al que sobra. He estado fuera unos días, más que nada buscando cierta dosis de tranquilidad, pero voy y me encuentro con una desasosiego que amenaza algunos momentos mi paz, es la inquietud de no tener nada que hacer, nada que resolver, nada que empezar, de mirar hacia el mar y sólo ver a los pescadores, de mirar hacia las flores y ver al jardinero, de observar a ésta extraña pareja y ver la miseria que los une, o hacia el distinguido dueño del hotel y ver a su mustia esposa. La angustia de no poder leer más de treinta páginas seguidas sin que se cierren los ojos, o sin que aparezca una vocecita muy peculiar reclamando a los que no están y me apetezca cerrar el libro antes que nada, y la inquietud acompañada de nauseas en la madrugada por haber cenado como cenan los ricos: plato entrante, segundo plato y postres, y todo ello servido con un buen vino y por dos atentos camareros. Eso es vida, aunque creo que ya no es mi vida. Y lo de desaparecer creo que es un deseo que no solo tienen los que han vivido el éxito de alguna manera, este deseo está en todos nosotros alguna vez, si bien, después nos entren las ganas de volver a aparecer aunque sea para tranquilizar a alguien que suponemos nos echa en falta en algún momento de su existencia. Al Doctor Pasavento, dice cuando no imagina, nadie le echaba de menos y era libre para desaparecer a su antojo durante días, meses, años.

Cuando haya calado algo más del libro, ya os contaré...

Gestos

Este viernes pasado, me proponía a hablar de los gestos y se me resistía el tema. Escribía, borraba, escribía y nada hasta que decidí abandonar y mirar algo en la red referente a los gestos. Antes pero, me anime a encender el Messenger, cosa que en los últimos meses hago muy poco y me tropecé con una sorpresa acompañada de un gesto, breve, nada convencional, como siempre, pero un bonito gesto al fin y al cabo, un gesto, un guiño que llega de tarde en tarde, de mes en mes, de seis a siete ó de siete a ocho, pero significa algo aunque que lo que simboliza cueste entenderlo y no salga a cuenta explicarlo más de lo que ya esta explicado. Como es natural, poca cosa encontré de los gestos a los que me refería en google, pero topé con mucho material sobre los otros gestos, sobre el lenguaje de los gestos. Nada tenía que ver con lo que quería escribir pero me entretuve y puse al corriente leyendo, que por mis gestos soy una persona segura (dicen mis pulgares que sobresalen alguna vez del bolsillo donde escondo mis manos, o mis manos abiertas tocándose los dedos alguna vez mientras escucho una conversación, o mis ojos fijándose en otros ojos) Un tanto desconfiada ( dicen mis frecuentes cruces de brazos) Y cuando fumo, echo el humo hacia arriba, cosa que según estos manuales de gesticulación, también indica seguridad y dominación. (Puedes ir pensando en tus gestos, explican cosas múltiples sobre nosotros). En fin, no eran esos gestos a los que intentaba referirme, porque yo cuando fumo y echo el humo hacia arriba lo hago para que mi interlocutor no se trague mi humo. A eso yo le llamo consideración, no dominio ni confianza. Así que podríamos dudar de estas teorías como dudamos de cualquier cosa que etiquete el alma, el carácter o nuestras ideas. Quería hablar de los gestos que indican que pensamos o estamos cerca de una determinada persona o que nos indica que ella está cerca de nosotros. No hace falta ser un especialista en gestos para hacerlos ni para detectarlos cuando los recibimos, pero si necesitamos tiempo, mucho tiempo para saber, para darnos cuenta de que si durante mucho, mucho tiempo no hay ningún gesto, es que realmente hemos dejado de interesar a aquella persona de la que esperábamos algún gesto que otro y con éste nos manifestaba que estaba allí, quizá no de la manera que quisiéramos, de la manera que nos gustaría, pero está… Esos son los gestos de los que pretendía escribir, esos son los gestos que me interesan, de esos gestos me sostengo y de ellos intento alimentar a las personas que amo. Y si no los hay, tampoco hay que darle más vueltas, si no llegan, es que algo se acabó

A veces, no puedes expresar los sentimientos, o las ideas que pasan por tu cabeza es imposible articularlas con palabras. A veces, sientes que sientes pero no te es posible enunciar lo que sientes. Puedes hacer un guiño, un gesto que dé a tu compañía una pista, puedes hacer un profundo suspiro que delate parte de lo que tu mente intenta descifrar, puedes reflejarlo en tu mirada, puedes sentirlo pero no puedes ni podrás expresarlo ahora ni nunca. O si, quizá llegue un día en el que las palabras fluyan fáciles porque ya nada consideres importante o prescindible a no ser que sea lo que has vivido con autentico sentido y hayas olvidado lo que has sobrellevado o los prejuicios que un día te hicieron callar.

Si tus ideas no son claras, es mejor silenciarlas, si tus sentimientos son confusos, es preferible esperar que se iluminen. No eres un genio, no tal y como lo describía ayer Valentí Fuster: Un genio es alguien que mientras te escucha o habla está creando continuamente en silencio y cuando decide poner en práctica aquello que ha estado imaginando, obtiene el éxito. Así pues, como sabes y siempre has sabido que pronunciarte no iba a ninguna parte, has preferido callar y solo dejar escapar lo que ves claro. Quizá el tiempo te dé otra perspectiva de lo que no acabas de entender ni tú, o quizá el tiempo te conduzca a sentir diferente. Los genios, decía un personaje de House también ayer, no se casan, no forman una familia ni se instalan en las ideas, los genios persiguen su propia idea hasta que esta les retuerce por dentro y les hace estrellarse con el éxito. Los genios, son capaces de perder todo lo que tú tienes ganado por su idea, de sufrir la soledad por su idea, de matarse incluso por su idea, pero nunca la abandonan por nada y por nadie. ¿Te he dicho alguna vez que soy grandiosamente mediocre? Por lo tanto, no espero, no quiero que me trates como si no lo fuera…

danza

Barcelona, hoy, epicentro del toreo, comentan algunos medios. Y que nadie se extrañe, porque Barcelona no es casi nunca noticia gracias al mundo del toreo. De hecho, la Monumental solo llena en extrañas circunstancias, o como hoy, por exquisitas . Lo malo de todo esto, es que muchos se quedaran fuera por el elevado precio de las entradas que debido a la presencia de un gran público venido de todas partes para ser testigos en directo de la vuelta de Tomás, hombre entotsolat donde los haya, pero que esta manera de ser no parece importar a vips que no han dudado en estar presentes en éste acontecimiento porque quieren y pueden. Estarán todos o casi, desde políticos como Pilar Calvo y E.Aguirre, hasta cantantes como Serrat y Sabina, desde conocidos creativos como Mariscal hasta intelectuales como Francis Wolff. Actores, actrices, como Manel Fuentes y Silvia Munt , la Pataky y Adrian Brody... La crème de la crème fijando su mirada en el regreso de un personaje extraño que ha elegido Barcelona como punto de partida y quizá como punto y final a una carrera corta pero intensa que ha suscitado más pasiones que criticas pero sobretodo un reconocimiento con reverencia incluida que hace tener la sensación que la grandeza no es necesario exhibirla, sino demostrarla. Y a pesar de ello, Tomás, José Tomás, ha preferido pasar desapercibido, alejarse muy lejos de medios y miradas, y regresar tras cinco años de silencio y de reclutamiento, aquí, en la Monumental, la misma que un elevado grupo de fervientes defensores de la dignidad del animal han escogido como flanco para decir: No.

La Monumental, la misma donde ERC quiere trasladar el mercat dels Encants... Tomás, hoy, se enfrentará a dos bestias a la vez. A una, la intentará lidiar como el sabe y quiere, a la otra, no, a la otra bestia quizá lo hagan los mossos o quizá sea la misma discordancia que la atrae: Prohibido machacar, prohibido negar.Y como todas las bestias tienen razón de ser, razón de estar y por lo tanto, motivos para ser lidiadas, queda terminantemente prohibido hacer una mala faena en nombre del personal

hurricane

La mesa puesta

En el amor están los que pensamos en que preferirá para cenar, los que compramos velas, escogemos la música, ponemos la mesa, pensamos siempre en alguna sorpresa, imaginamos siempre aventuras y viajes i esperamos como el que espera el fruto de una plegaria el día que estas aventuras y estos viajes nos hagan zarpar. A pesar de toda la ilusión que ponemos en cada pequeño detalle, en cada minúsculo instante, aceptamos postergaciones, cancelaciones, cambios, albóndigas de escusas imposibles de creer pero que decidimos creerlas porque no aceptamos que nadie ni nada nos estropee la idea de nuestro bello romance. Nadie ni nada, tampoco nuestro amante. En el amor estamos los que ponemos el amor, la mesa, la cena, la inocencia, la gratitud, la sinceridad, nuestra enamorada alma, nuestra carne enamorada, el campo de batalla, los soldados, las armaduras y las armas y nos ofrecemos también como blanco.

En el amor hay también los que no han pensado en nada y llegan a casa y les parece tan natural encontrar que alguien haya preparado la cena que comen en la mesa de cualquier manera o recogen el plato y se sientan a comer mirando el televisor. Que haya velas encendidas ni se ha enterado. Que tu estas en casa, imagino que si se ha dado cuenta pero tienen la admirable capacidad de disimularlo con absoluta credibilidad. Perdona, si que se ha dado cuenta, que estas, ¿ves como sí se ha dado cuenta que estas ahí? Justo en éste mismo instante se dirige a ti para pedirte que te calles, que si no puede seguir viendo lo que hacen en el televisor. En el amor siempre hay quien le parece que este vestido no te favorece nada, que te has equivocado de peinado, que no hacía falta tanto revuelo para una simple cena. En el amor siempre hay quien te dice que hoy no puede o mañana tiene un compromiso ineludible. En el amor siempre hay gente ocupada, realistas, gente que te hace un perfecto balance de los últimos 15 días y te hace observar que en estos os habéis visto demasiado, que no puedes quejarte y que has de entender que ellos también tienen su propia vida. En el amor siempre los hay que devoran amor como lo hace el perro en su recipiente siempre que hay algo para comer, los que abandonan el móvil y la cartera cuidadosamente cerrados encima de la mesa puesta y apagan el cigarro en plato de la taza de café, los que dan por hecho la cena y lo engullen sin darle la menor importancia, quizás hasta eructen y este será el mejor elogio y el único agradecimiento que puedas esperar. Los que apresan tu carne como si de carne de ternera se tratase y la hacen girar vuelta y vuelta con una pizca de sal, si estás de suerte; los que en cada pequeño gesto ofrecen tan poco que acabas tomándolo como si fuera una caridad, los que cada pequeño beso parece robado, arrancado y de tanta historia, de tanto amar al fín y de tanto perder y aun ganando la victoria sabe tan amarga, que acabas por sentirte inevitablemente un idiota.

Nunca se aprende, ni de una manera ni de otra. Ni tú eres responsable de dejar de ser una boba, ni el otro es responsable de no saber comportarse como una persona y hacerlo como un orangután.

Pero déjame decirte una cosa, por extraña que te parezca. Perdemos casi siempre pero somos invencibles los héroes de la ternura. Existe una idea de belleza que se hace un poco más realidad cuando tu pones la mesa y le esperas con las velas encendidas y, por muchos desplantes que hayas tenido que soportar, lo haces con la misma ilusión de siempre. Existe una idea del amor que desciende un poco más del cielo y se extiende sobre todos nosotros cada vez que tu nos ofreces tu alma y tu carne enamorada y cada caricia te conmueve hasta en la más intima raíz de tus sentidos y de tus emociones. No nos está permitido saber exactamente donde, pero el amor generoso y sincero que entregamos se acumula siempre en un lugar secreto y escondido del mundo y es de allí donde las estrellas fugaces recogen el poder de convertir en realidad tus deseos cuando caen, y es desde allí donde tus ojos podrán siempre recoger la luz para observar la playa en ésta hora mágica que parece abrir su brazos por si la expansión, hoy, quisiera instalarse. En algún recóndito lugar el amor sublime y sin medir que entregamos se dirige a descansar aunque sea para regresar en el último instante, porque cuando sea necesario hacer balance te brille como polvo de hada en tus dedos: “No tengas miedo, eres la mejor, eres inmortal”

Passa.ho!

Como decía, a veces topamos con cosas que no podemos evitar pasar a otras manos que sin duda sabrán apreciar el ardor, el tiempo, la ternura y la obra de un ser a veces, omnipotente y presente, el cual alguna vez, alguna, se deja ver, o podemos mirar sin ganas de morderle el cuello:

AMOR DE TAULA PARADA

En amor hi ha els que pensem què li agradarà per sopar, els que comprem les esplemes, triem la música, parem la taula, pensem sempre en alguna sorpresa, imaginem aventures i viatges i esperem com qui espera el fruit d’una pregària el dia que aquestes aventures i aquests viatges ens posin a navegar. Tot i la il·lusió que posem en cada petita cosa, en cada petit instant, acceptem postergacions, cancel·lacions, canvis, mandonguilles d’excuses impossibles de creure però que nosaltres ens creiem perquè no volem que ningí ni res no ens espatlli la idea del nostre bonic romanç. Ningú ni res, tampoc el nostre amanat. En amor hi ha els qui posem l’amor, la taula parada, el sopar, la innocència, la gratuïtat, la sinceritat, la nostra ànima enamorada, la nostra carn enamorada, el camp de batalla, els soldats, les armadures i les armes i ens oferim nosaltres mateixos com a blanc.

En amor hi ha també els que no han pensat en res i arriben a la casa i troben tan natural que algú els hagi preparat el sopar que seuen a taula de qualsevol manera o prenen el plat i es posen a sopar mirant la tele. Que hi ha espelmes enceses ni se n’han adonat. Que tu hi ets, a casa, suposo que sí que se n’han adonat però tenen l’admirable capacitat de dissimular-ho amb una absoluta credibilitat. Perdona, sí que se n’ha adonat, que hi ets, veus com sí que se n’han adonat? Justament ara s’adreça a tu per demanar-te que callis, que sinó no pot seguir el que diuen per la tele. En amor sempre hi ha qui troba que aquest vestit t’afavoreix gens, que t’has equivocat de pentinat, que no calia fer tant rebombori total per un sopar. En amor sempre hi ha qui avui no li va bé i demà té un compromís que no pot deixar. En amor sempre hi ha gent ocupada, realistes, gent que et fa balanç dels últims 15 dies i et diu que ens hem vist molt, i que no et pots queixar i que també ells tenen la seva vida. En amor sempre hi ha els qui devoren l’amor com el gos que menja del seu pot sempre que hi ha menjar, els que deixen la cartera i el mòbil damunt de la taula curosament parada i apaguen les cigarretes al plat de la tassa del cafè, els que donen per descomptat el sopar i se’l mengen sense donar-li cap importància, potser eructen i tot i és el màxim elogi i l’agraïment més gran que pots esperarar. Els que prenen la teva carn com si fos de vedella i la giren i la tomben, volta i volta i si tens sort una mica de sal, els que cada petit gest és tan escàs que te l’acbes prenent com una caritat, els que cada petit petó sembla que l’hi hagis d’arrencar i al final de tant arrencar i de tanta història, al final de tant estimar i de tant perdre i que si guanyes tingui un gust tan amarg la victòria, t’acabes sentint inevitablement idiota.

No se n'aprèn mai, ni d'una cosa ni de l'altra. Ni tu és probable que deixis mai de ser una bleda ni l'altre és probable que passi a comportar-se com una persona en lloc de fer-ho com un orangutà.

Però deixa’m dir-te una cosa, encara que et sembli estranya. Perdem quasi sempre, però som invencibles els herois de la tendresa. Hi ha una idea de bellesa que es torna una mica més possible cada vegada que tu pares la taula i l’esperes amb les espelmes enceses i, per molts desplants que hagis hagut d’aguantar, amb la mateixa il·lusió de sempre. Hi ha una idea de l’amor que baixa una mica més del cel per estendre’s sobre tots nosaltres cada vegada que tu ofereixes la teva ànima i la teva carn enamorades i cada carícia et commou l’arrel més íntima dels teus sentits i de les teves emocions. No ens és permès de veure exacatament on, però l’amor generós i sincer que donem s’acomula sempre en algun lloc secret i amagat del món i és d’allà on els estels fugaços prenen el poder fer fer realitat els teus deistjos quan cauen, i és d’allà on els teus ulls podran sempre treure sempre la llum per mirar la platja en l’hora màgica que sembla que obri els braços per si l’onda avui es volgués quedar. En algun lloc secret i remot l’amor total i sense càlcul que donem se’n va a reposar encara que només sigui per retornar en l´’ultim instant, perquè quan calgui fer resum et brilli com pols de fada al dits i et digui: “No tinguis por, ets la millor, ets immortal”.

salvador sostres

(ya lo traduciré cuando tenga tiempo)

Sunscreen

Un buen e ingenioso articulista del diario AVUI, Iu Forn,titula o titulaba así su columna: Passa-ho!. Este video lo he encontrado en el blog de Marciano: http://diariointimodemarciano.blogspot.com/ , y vale la pena perder un par de minutos atendiéndolo. Así que lo miras, y si quieres: ¡Pásalo!

Destapa-La

Resulta que la culpa de que muchas mujeres acaben asesinadas en manos de sus parejas, no es culpa de mentes enfermas. La culpa de que muchas mujeres cobren por el mismo trabajo que realizan hombres, bastante menos, ya no es responsabilidad de los empresarios. La razón por la que muchas mujeres son despedidas al quedarse embarazadas o, directamente, ya no son contratadas, no es por culpa de directivos acomplejados y llenos de prejuicios o de una SS sin imaginación. La culpa de estas muertes no es de unos hombres con una autoestima por lo suelos y cargados de odio y resentimiento. Ahora, ahora resulta que la culpa de que existan en el siglo XXI aún todos estas diferencias, frustraciones y actos violentos, es de algunas campañas publicitarias. “Destapa-la. Es tota teva” y un rostro de mujer de aspecto andrógeno con labios y parpados pintados de verde chillón, ha sido motivo de censura, de polémica y de retirada por no sabría bien como definir..., si de un colectivo exaltado, o el puro oportunismo de unos pocos que siempre asoman la nariz allá donde huele sin importarles si lo que asoma es tufo o perfume . En fin, mientras esta campaña publicitaria pretendía insinuarnos a Lleida como una tierra digna y por descubrir, tierra la cual, siempre ha estado tapada por una gruesa frazada que ya iba siendo hora de retirar, unos han visto antes la peca que la chispa en esta frase y la imagen que la acompaña. Pues miren, son ustedes precisamente, los que alzan sus escandalosas voces por memeces asi, son ustedes los responsables de que otros no tomen en serio un trabajo muy serio. Ellas, hartas ya de estar hartas siguen intentándolo y ustedes solo hacen de coro desafinado. Mientras centenares de hombres y mujeres luchan de verdad por ensalzar su dignidad como seres humanos, van ustedes con sus estreñeces a embozar aun más el caño. Precisamente, es por culpa de sus convulsivos aullidos que todo un colectivo que trabaja duro, en condiciones complicadas, es tomado a chirigota , es por culpa de su delicada piel que otras deben tener pieles de búfalas para soportar que las llamen imbéciles o mal folladas mientras están muy ocupadas en su tarea y su causa. Causa que casi siempre va mucho más allá de los fogones de su cocina o de la reducida corte de cuatro amigos compinches: cuadrilla de snobs requete-mimados por la vida.

Chad

Se me ha ocurrido clicar hoy sobre una anunciado que nunca me ha interesado: "Los hombres más sexys". Y no digo que no me gusten, digo que no me interesan y nunca lo han hecho, puede que me falte fantasía, puede que mi ánimo sea de lo más soso como un palosanto en primavera, pero nunca me han atraído los artistas, los cantantes, personajes imaginarios a mi modo de entender. Solo recuerdo una vez que me colgué de uno, era el Doctor Gannon que interpretaba Chad Everett cada viernes por la noche, pero eso fue hace mucho, yo, era una criaja que intentaba acostarme un día a la semana tan tarde como los adultos de mi casa y que una vez al mes después de someterme a una dosis de la dolorosa Gamma-globulina a modo de inyección para reforzar mis defensas, recibía el premio de poder disfrutar una hora de la sonrisa del rubio y amable doctor. Solo recuerdo haberme colgado de un personaje ficticio una vez, y tan solo era una marreca. Total, que he clikado en los más sexys hace tan solo un momento y he repasado que ofertas estaban en el mercado y el gusto de hoy en día y a la mayoría no les conozco ni de vista, a otros si, pero ninguno de ellos cumple mis expectativas ni siquiera en sueños.Llámame fría, dime sosa, pero les falta algo, les falta poderío, les falta movimiento, les falta propiedad. Quiza les falta corazón...

O no?

Sin ti no soy nada

Héroe o villano, o al revés

Cuando alguna vez me han preguntado si era rica, pregunta que por cierto apetece bastante hacer aunque no se haga abiertamente, siempre se me ocurre la misma respuesta: ¿Comparado con quién? Y esa es una respuesta aplicable a varias cuestiones banales que todos nos preguntamos de otras personas o a la que somos sometidos alguna vez. Para Francisco o Erlan, desde luego, soy una persona rica económicamente hablando. Para un niño hambriento del Congo, Erlan y Francisco son ricos, yo sería una especie de mecenas. Para el vecino de arriba que hace muy poco se mudó de éste bloque donde vivo, yo, no soy rica, Francisco y Erlan son pobres, y el niño del Congo la decadencia en persona, un fracaso consentido . Con los anhelos o sueños pasa lo mismo, mientras unos deliran con una comida en el Bulli, otros soñamos con saborear de nuevo aquel sabroso Sachertorte y muchos más subliman su fantasía con un plato caliente no importa de qué. Los hay que en éste preciso instante divagan con acaparar terrenos ahora declarados zona agrícola, porque alguien les ha chivado que pronto serán recalificados por el Ayuntamiento que corresponde. Mientras tanto, sus vecinos sueñan en el último plazo de la hipoteca de su casa. Y un poco más allá está quien desea conquistar el Everest, o vencer el Campeonato del mundo GP, o ser aclamado en la Opera de Viena haciendo de Don Giovanni. Y mucho, mucho más allá, hay alguien que después de un largo viaje de ilusiones de ida y vuelta, ha conseguido por fin realizar su sueño más ambicioso: Poder vivir otra etapa de su vida sentado en una silla de ruedas y estar bien de salud. Isidre Esteve, lo ha conseguido. Hoy, después de haber estado dos meses internado, ha sido dado de alta y dice estar feliz después de un grave accidente en el que casi pierde la vida.

Aprite Le Finestre

Dedicado a NDD y a todas las niñas respondonas

Tu, eres impulsiva, generosa, pasional pero como casi todos lo hacemos, solicitas algún consejo aunque en tu proceder parezca que seas dueña de todas las respuestas. Los consejos, no son más que resultados experimentados por otros, así que no tienen más valor que el de hacernos compañía.

Cuando alguien te pregunta, si la pregunta te importa y te importa la posible respuesta y tienes suficiente espacio o tiempo para responder, has de hacerlo desde la reflexión. Has comprobado ya anteriormente que puede haber cómo mínimo tres respuestas válidas a una pregunta. Y digo tres por no decir más, porque de haber, hay muchas. Pongamos un ejemplo: XP, hace una afirmación y la argumenta. El tal XP, publica en un determinado medio dicha opinión y tú la lees y te molesta, no solo te molesta, ¡te enfada mucho! Después de asimilar lo que acabas de leer, respiras hondo y decides volver a leer aquel texto que acaba de indignarte por si acaso te hubieras saltado un matiz que se te haya pasado y cambiar el sentido de la intención del autor. Lo haces, lees de nuevo y compruebas que habías leído bien y que nada hay que te salve a ti de tu indignación y al autor de todos los rapapolvos que le caigan a partir de éste provocador texto. Decididamente has de responder aunque no hayas decidido cómo.

¡Ensaya!

Seguro que él lo ha hecho antes de escribir éste puñado de bazofia, y si no lo ha hecho, se merece que tu lo hagas. Ensaya antes, porque tu primera respuesta seguro que será la peor. Escríbela, léela, bórrala (pero no antes de haber escrito al menos dos respuestas más) aunque sea válida y mucho más indulgente que el amasijo de frases que la motiva. Deja pasar unos segundos y mientras vuelves a leer éste punzante texto. Vuelve a intentarlo con otra respuesta. Y otra, y las que te hagan falta hasta que des con la que más se acerque a lo que quieras expresar y aleje de mostrar tu enfado irracional. Ahora, ahora que ya has expresado en todas ellas todo lo que querías, ahora que por fin has dejado volar toda tu indignación, bórralas todas. Lo mejor es que te vayas a por un café y te olvides de responder. ¿Vale la pena? El día te responderá. Si cuando has cumplido con todo aquello que tenías que hacer, si has resuelto todo aquello que estaba por resolver, si has traspasado la barrera del prejuicio y del orgullo, del enfado y la rabia que sentías por una opinión y alejado lo suficientemente de ella para relativizarla, decide si valía la pena tu repuesta. Desde luego, si decides ejecutarla, tu respuesta será un cóctel de todas las que habías escrito hace muchas horas, pero seguramente será la que más se aproxime a lo que querías decir, será la más honesta, la más ajustada, la escogida. Ojalá tuviéramos siempre la oportunidad de tener todo el día para responder a algo que no nos ha gustado. Y no olvides nunca que la respuesta elegida será una más para su destinatario, pero habrá sido una lección para ti.

(en honor a un breve consejo dado por una mujer a una niña que respondía siempre cuando estaba enfadada sin importarle las consecuencias, y que no ha olvidado).

La mer

Y aún cuando la mañana amanece clara, limpia, jubilosa, puede ser que no halles motivos para disfrutarla. Puede ser que aparezca un porqué que empañe tu mirada. Es el sí pero no. Es el puedo pero no quiero. Es la mancha que ves y no consigues borrar. Es la elección. Podrías hablar de ella, podrías entristecer a éste reducido mundo en un solo minuto, podrías recordarle que también el, ella, y tu sois breves como la luz de éste radiante día . Pero no lo harás y concentrarás esa tonada en tu otra amiga llena de ilusión en el futuro, o en ese solitario compañero de barra matutino que te pide un inocente beso sin saber el por qué y te hace sentir importante un instante, hoy. Hoy, día espléndido despejado de nubes y con olor a jazmín, sé generoso para que pueda invocarte cuando tu luz se apague.

"...La geganta i el gegant,
ara ballen, ara ballen
La geganta i el gegant,
ara ballen i siempre ballaran "

De Joan Maragall.

Dedicado a un ruiseñor

Hay personas que hablan mucho y acaba diciendo poca cosa. Las hay, menos, que con cuatro palabras inundan de contenido el mensaje. Decía Galeano que un maestro en el arte de la escritura le aconsejaba siempre después de escribir, leer y borrar, borrar y solo dejar lo que realmente expresa algo. Y así, cogió el hábito de ir tachando líneas a sus textos y poesías hasta despojarlas de adornos vanos. Quien lee ha de recibir bien el mensaje y el mensaje ha de ser claro y sencillo Peaceful Easy Feeling. Un pacífico y fácil mensaje, eso es. Tenemos la costumbre de hablar mucho cuando en el fondo solo deseamos decir un te quiero, un te extraño, o algo así. Tenemos la costumbre de defender el mensaje, de eludirlo, de dilatarlo, de eternizarlo solo para aprobar o denunciar algo hasta que acabamos consiguiendo que quien lo recibe se aísle. Hay personas que aglutinan sus sentimientos y son capaces de reducirlos a la mínima expresión y consiguen su propósito. Comprimir el sentimiento hasta hacer que parezca fácil, solo lo puede hacer un artista.

Lo que sucede Maestro, lo que a veces pasa, es que uno, una, se consiente bailando con las palabras para hacerlas sonar acompañadas de la música que suena su interior. Es un canto que suena en aquel mismo instante o que ha sonado alguna vez y vuelve a hacerlo y es inevitable iniciar el baile en éste espacio en blanco donde se nos aparece una pista vacía que incita a invadirla a nuestro antojo ¿Te imaginas algo más atrayente? Cuando esto sucede, las palabras fluyen como por arte de magia aunque todos ya sepamos a estas alturas que no es magia, sino una especie de emancipación del espíritu, una especie de ilusión armónica en la que estas solo tú, esa música y en el centro, tu objetivo.

"Només vull una rosa vermella —va clamorejar el rossinyol—, només una. No hi ha cap manera que la pugui haver?

Si vols una rosa vermella —li va explicar el roser–, pots fer-te-la tu mateix amb música, a la llum del clar de lluna, i tenyir-la amb la sang del teu cor. Has de cantar per mi recolzant el teu pit sobre una espina. Durant tota la nit cantaràs i l’espina anirà penetrant dins el teu cor fins que la teva sang inundi les meves venes i es converteixi en la meva pròpia sang." Fragmento de El Rossinyol i la Rosa. Oscar Wilde